El día presentava-sé muy caliente con una radiación solar por demás sofocante y si bien estabamos en veráno muchos de los habitantes de la Aldea de Fontoura nos quedamos helados al observar a través de nuestras ventanas el humo que nos rodeaba, comprobando luego que todo estaba a arder a nuestro alrrededor.
Sinceramente fue un espanto pero "Gracias a Dios" y a los diestros Bomberos que vinieron a socorrernos, logramos salir del paso con la provisión de agua que suministrara el Pozo de un campo vecino.