FONTOURA EN ULTRAMAR
Para ser justa con el sexo débil, voy a rescatar del olvido involuntario de los pueblos la entrañable imagen de una humildemente grande Mujer de Fontoura y sirva este mensaje como Homenaje a todas la Madres Portuguesas que ofrecieron con gallarda determinacion la vida de sus hijos a la Patria.
Una Patria que no siempre supo valorar y reconocer el sacrificio y desprendimiento de esas maravillosas Mujeres que silenciosamente continuaron sus vidas dando gracias a Dios y a la Virgen de Fátima por haber sido las elegidas en dar vida para la vida.
En este caso, nos referiremos a Doña Joaquina Pereira Pinto Caldas una sensible mujercita miñota que acostumbrada a la labranza del campo y sin demasiadas expectativas de futuro, aceptó con estoicismo el llamado de sus hijos para la guerra.
Aquella Madre con mayúsculas que vivio con angustia y preocupacion constante la partida de sus cinco hijos varones para la tropa, supo empeñar su esperanza en el Señor de los Aflitos y con lagrimas a raudales en sus mejillas, los dejo partir sin imaginar ella por su rustica ignorancia que algun dia su nombre iba a quedar grabado en la Historia Viva de Portugal.
Y aqui estamos ahora; colgando en el Blogger de Fontoura For Export una sintesis recordatoria de esa inigualable Madre Miñota quien junto a sus hijos Heliodoro; Severino; Laurentino; Manuel y Delio ofrecieron voluntariamente el corazon a su amada Paria Portuguesa y en un magnifico ejemplo de gratitud y entereza acompañaron a su tierra a traves de las profundas aguas de Ultramar.
En reconocimiento a su gran altruismo la Cruz Roja Portuguesa tuvo el buen tino de Homenajear en Vida a esa santa madre miñota, obsequiandole una inmaculada Imagen de la Virgen Maria para que la acompañe en su casa por el resto de sus dias.
Como corolario de ese gran desprendimiento al terminar las Operaciones Militares Doña Joaquina Pereira Pinto Caldas fue Galardonada con la Cruz de Guerra que recibiera su hijo Heliodoro en reconocimiento a su Valor y tras retornar todos sus hijos a la tierra, coincidieron en acompañar con gran dedicacion, afecto y alegria a su longeva y vizarra madre hasta el momento de su muerte.
